ARTÍCULOS DE OPINION

LAN sí, pero no al atropello y abuso a nuestras normas

Por:Adriana Meza

El ingreso a LAN en su momento llenó de espectativa a la comunidad galapagueña, ávida de que se estabilice las condiciones de cupos para los residentes de las islas Galápagos, que cada vez y cuando tienen que soportar el discrimen de las aerolíneas que operan en Galápagos,para trasladarse a la parte contienetal.

El problema no está tanto en la venta de pasajes de salida, sino el retorno. Y nisiquiera se puede asegurar la compra de ida y vueta porque simplemente se menciona que no hay disponibilidad, y se pone a sujección de espacios o en lista de espera. Pero a donde se llega finalmente es que muchos residentes se ven inclusive obligados a comprar los tickets como pasajeros nacionales debido a la urgencia de volver a las islas para continuar con sus actividades cotidianas.

El pedido del Alcalde de San Cristóbal, Pedro Zapata, es comprensible desde el punto de vista de potenciar el turismo local, pues LAN se ha caracterizado por promover un turismo que viene especialmente desde Argentina y otros países sudamericanos, es correcto quizás por las fuentes de ingresos que se pueda mover producto de aquello.

Por otra parte es destable la apertura que ha brindado el Presidente de la República para propiciar un escenario productivo que promueva el turismo en las islas a través de nuevas frecuencias aéreas. Pero lo que se debe de frenar es el atropello hacia nuestra gente y el abuso a las normas existentes.

Con mucha pena, me ha tocado en dos oportunidades y coincidencialmente viajando a la isla Isabela desde SantaCruz, ser testigo del abuso de dos grupos con acento argentino, dirigiéndose con malos tratos hacia un par de guías, rehusándose a pagar la tasa por uso del muelle en Puerto Villamil. Y en otra ocasión una turista visiblemente argentina refiriéndose en malos términos hacia nuestra gente porque "aqui todo es caro".

Considero que como ciudadana ecuatoriana, se debe de exigir más respecto para nuestra gente. En ninguna parte del mundo creo que un ecuatoriano se atrevería a rehusarse a cumplir cualquier norma y más bien la televisión internacional ha difundido en algunas ocasiones el maltrato y marginación de la que han sido víctimas muchos conciudadanos.

Se debería de potenciar un turismo mucho más selectivo, y claro está en que nuestros servidores turísticos deberán de mejorar aún más sus servicios a fin de revalorizar no solo lo que se ofrece, sino además darle el verdadero valor que se merece Galápagos. Y no permitirse más abuso, porque no siendo simplemente extranjero se tiene la última palabra y el poder para pretender abusar y maltratar a nuestra gente y en nuestra propia casa.

El rumor el único medio que prevalece en Isabela

Por: Adriana Meza
“Son rumores, son rumores…no haga caso de la gente, son rumores”…Nada de rumores..!!!!, es la pura y neta verdad, la falta de medios alternativos es evidente en la isla Isabela. Nadie sabe, nadie supo… Desde el día en que oscuros intereses propiciaron el cierre del único medio radial local.

La Ley del péndulo, no solo afecta a los posibles causantes, sino que además afecta a toda una comunidad ávida de información veraz y oportuna. Es increíble recoger el sentir de muchas personas en un ambiente donde lo único que impera es el rumor.

Es la silenciada voz de quienes ven con amargura, una serie de aspectos que resultan lacerantes a sus intereses. El malestar se hizo público en las expresiones de un ciudadano que protestó por el mal estado de las calles y los puntos de conexión vial hacia los sitios turísticos de la parte alta. El muelle marinas para fibras, de ingreso a Puerto Villamil, presenta una evidente imagen deteriorada, al igual que la falta de adecentamiento de calles y avenidas.

La influencia que ejercen los medios de comunicación sobre la sociedad es innegable. La falta de capacidad de intervención y contacto con la comunidad de los actores públicos para informar sobre su gestión puede resultar perniciosa.

Mientras que las sociedades modernas se arman de múltiples sistemas de comunicación principalmente basados en los principios democráticos, para una adecuada gestión de la información, en Isabela, todo es aquí: “en voz baja”, nada más que rumores.

¡Dios que no desaparezca la fe, conforme se esconde la cruz!

Resulta un choque óptico la nueva edificación de la iglesia de la comunidad Cristo Salvador en Puerto Villamil, isla Isabela, Galápagos. Ojala no desaparezca la fe conforme se esconde la cruz en medio de la gran muralla de cemento de más de 10 metros que hoy se levanta.

La fe y acogida de los feligreses no se mide ante una gran infraestructura o los lujos que contenga o la cantidad de imágenes. El principio debe de estar más enmarcado hacia la solidaridad, a recuperar la credibilidad de los católicos en este caso y sobre todo a establecer la armonía.

Tenemos que ser consecuentes con lo que predicamos y ser conscientes de que vivimos en un sitio privilegiado como lo es Galápagos, que así sea una pequeña práctica tenemos que sumar positivamente en nuestra responsabilidad social con nuestro entorno, y ser coherentes sumando prácticas que contribuyan a preservar lo nuestro y más aún a establecer una identidad propia.

Por otra parte dónde está la recuperación de patrimonios por los entes respectivos, considerando que tras de la iglesia Cristo Salvador, se esconde un sitio con enorme valor cultural: La vieja capilla que fue construida con piedra lava de manera rústica a manos por Don Pilamunga en 1953, lugar que sirvió de refugio en la época de los sublevados de la colonia penal y que al igual que la vieja casa de madera construida entre 1949 y 1950, deberían de ser un sitio recuperado con sentido histórico… Hasta cuándo Padre Almeida, hasta cuándo..!!!...

El Derecho ciudadano vs la revocatoria de mandato

Por: Adriana Meza

La participación ciudadana, con responsabilidad, ecuanimidad, fundamento y raciocinio puede resultar un excelente aporte a la vanguardia de los intereses colectivos de una comunidad. Pero si los procesos cognoscitivos de una temática están sopesados por el odio y sin un juicio de valor, puede constituirse en un arma de doble filo. He allí la importancia de actuar con responsabilidad.

La revocatoria de mandato a los dignatarios de elección popular, está en manos de los ciudadanos de cualquier jurisdicción política del país. Ese es un derecho ciudadano que les otorgó la Asamblea Nacional Constituyente a través la Constitución Política del 2008. Señalado así en el artículo 61, numeral 6 “Revocar el mandato que hayan conferido a las autoridades de elección popular”.

Esta es una forma de derechos ciudadanos conceptualizados en el contexto de participación ciudadana, como una manera de controlar la gestión de los notables elegidos por elección popular. Los artículos 105 y 106 puntualizan los procedimientos y plazos a cumplirse para estos procesos revocatorios. De acuerdo a estos preceptos la solicitud de revocatoria del mandato podrá presentarse una vez cumplido el primero y antes del último año del periodo para el que fue electa la autoridad cuestionada. “La solicitud de revocatoria deberá respaldarse por un número no inferior al diez por ciento de personas inscritas en el registro electoral correspondiente. Para el caso de la Presidenta o Presidente de la República se requerirá el respaldo de un número no inferior al quince por ciento de inscritos en el registro electoral”.

Hasta octubre había 316 pedidos de revocatoria que deberán someterse a consultas populares para sacar de los cargos a alcaldes bajo supuesto incumplimiento de sus promesas electorales, entre ellos constaban los alcaldes de Quito, Guayaquil, Cuenca. Ya cayó una víctima de la revocatoria: El alcalde de Tiwintza y de allí cuántos más seguirán la lista. El asunto no es un tema de culpabilidad, pero hoy quienes aprobaron puntualmente estos articulados y por ende la Constitución deberían de reflexionar los tropiezos a los que hoy se ven abocados principalmente los alcaldes por ser los entes más vinculados a las comunidades.

La temática resulta hasta cierto punto compleja, considerándose que está en juego la institucionalidad, en este caso de los cabildos del país. Pero por otro lado prevalece el derecho ciudadano, el pueblo está en su justa razón de sentirse plenamente representado, caso contrario si prevalece la inercia, incompetencia y la falta de liderazgo, está en su derecho de reclamar bajo argumentos y exigir el reemplazo de los incapaces de gobernar.

La representatividad de un verdadero líder, se puede medir de muchas maneras. La obra tangible e intangible, es un elemento más que se conjuga con una serie de virtudes personales en el convivir y sentir de una comunidad. Cuando esas virtudes no fluyen y se refleja más bien a un títere a merced de los antojadizos intereses y caprichos de unos cuantos, puede suceder hasta que cualquier avezado pretenda pescar a río revuelto. Y hasta cierto punto es comprensible que después de una débil figura política, cualquiera soñaría con ser el próximo candidato. Mientras los que están en el poder siguen con la soga al cuello, muchos temiendo a la amenaza de revocatoria de mandato.

La tenacidad de los "Héroes verdaderos"

Por: Adriana Meza

A veces nos volvemos incrédulos en medio de un mundo de desesperanzas e ignoramos que la magia existe; sin embargo resulta mucho más valedero cuando nos damos cuenta que esa magia la motivan ángeles terrenales, que desde su accionar sirven de vínculos para ayudar a los demás.

Más allá de un acto de solidaridad está la responsabilidad social de los medios de comunicación y de quienes desde su perspectiva de producción, generan prestigio y rating de sintonía a través de sus realizaciones como es el caso del Programa "Héroes Verdaderos", que transmite Gama TV, donde se puede apreciar el escogitamiento muy bien acertado de los beneficiarios, que a través de sus diversas actividades muestran la tenacidad de verdaderos héroes frente a las adversidades de la vida.

Pero además, existen los padrinos o personajes famosos que comparten la experiencia de estas personas que sobreviven en medio de la extrema pobreza. Más allá de todo un esquema, está la imagen de un personaje, Yuli Maiochi, quien de una u otra manera se ha convertido en el hada madrina, recuperando el sueño de quienes más necesitan. Tal es el caso de una noble familia, que además de una serie de artículos de hogar, fue beneficiada con una casa, terreno y una muy buena oferta laboral por parte de la compañía Unión Constructora.

Las pequeñas y grandes acciones contribuyen sin dudas a un mundo más equitativo y solidario, que nos genera una concienciación frente a la vida y nuestro principio de amor al prójimo. Quizás a veces no podamos compartir de bienes materiales, pero con un gesto de amor y una sonrisa sincera, podemos contribuir a un mundo más optimista y esperanzador.

Este es un mensaje a los seres de luz, que desde una pequeña acción, contribuyen al crecimiento de las personas y a fortalecer nuestra fe en quienes si creemos que existen seres verdaderamente especiales.

El discurso político en el mes de la no violencia

Por: Adriana Meza

Resulta paradójico que mientras se unen fuerzas interinstitucionales en Galápagos para generar un cambio de actitud frente a la violencia, en noviembre denominado como “Mes de la no violencia”, surge el confrontador discurso político en medio de una comunidad ávida de mejores días.

Las concepciones políticas o pensamiento políticos, tienen asidero dentro de una lógica elemental, que es comprensible siempre y cuando esté enmarcada dentro del razonamiento humano en una sociedad que se alía a los ideales que más se asemejen o sientan que defienden sus intereses. 

Sin embargo se corre el riesgo de llegar al límite de la tolerancia, cuando surge el enfrentamiento de palabras donde se vulneran hasta aspectos familiares donde prevalece un discurso que desdibuja la imagen de quienes han sido elegidos para ser nuestros líderes y regir los destinos de una sociedad.

El discurso político, debe de ser una herramienta inteligente para la construcción de consensos. La sucesión de palabras y comportamientos de un líder pueden crear apatía sino se direcciona un mensaje conciliador, con una lógica dosis de inteligencia y respeto. 

El discurso disociador, arremetedor, insultante, genera una corriente de energía negativa que atenta contra el autoestima y confianza de una comunidad. Cómo entonces pretendemos promover una concienciación ciudadana sobre un tema lacerante como la violencia?, cuando quienes deberían ser ejemplo en una sociedad acuden al insulto, la confrontación y hasta el irrespeto al ente edificador de sus propias familias.

“Las palabras de la sabiduría están cerradas excepto para los oídos del entendimiento”, por el bien de Galápagos que fluya el diálogo y la razón, porque es probable que mientras los gatos se pelean, los ratones se aprovechen y se lleven el queso.

Los segregados defensores de la Ley

En los primeros días de octubre de 2010, un diario porteño publicó un comentario que decía “no está bien que sea el ejército el que tenga a su cargo la seguridad pública, puesto que es la policía la que conoce bien de qué forma actúan los ladrones…” Ciertamente, el ejército había asumido el control de la seguridad pública del Ecuador, como consecuencia del jueves 30 de septiembre pasado, cuando las mayorías ciudadanas vivieron horas de verdadera zozobra ante el intento de magnicidio, golpe de Estado y abandono de sus más vitales responsabilidades por parte de la Policía Nacional del Ecuador.

Obviando a contados buenos oficiales de policía y personal de tropa que he conocido –honestos custodios de sus lemas “Valor, Disciplina, Lealtad”, “Orden y Seguridad Social”- a lo largo de gran parte de mis 53 años de edad, algunos elementos de la policía de Migración, Tránsito y control urbano me han hecho vivir en carne propia una serie de inolvidables improperios, abusos e ironías. Además he visto, personalmente, a policías en servicio y uniforme borrachos orinando en la vía pública, empinando el codo en días de censos y comicios, tranzando con vendedores de droga en las calles, extorsionando a prostitutas y turistas, sustrayéndose objetos personales en la habitación de un amigo fallecido, acosando jovencitas desde sus vehículos patrulleros, armando farra a todo volumen en tranquilos vecindarios… ¿Contracultura o decadencia? Me he preguntado, ¿cuál es el caldo de cultivo del policía ecuatoriano promedio?

Ante la criminal y vergonzosa conducta de un grupúsculo de policías, demostrada hasta la saciedad ante el mundo el pasado jueves 30 de septiembre de 2010, en respuesta a los desatinados comentarios públicos de identificados periodistas y asambleístas, vertidos con el claro fin de manipular criterios a conveniencia de la postergada oligarquía, y puesto que en este país sí hubo conspiración e intento de golpe de Estado, me permitiré exponer a continuación unos puntos de análisis que espero pronto sean ampliados por algún sociólogo, antropólogo, jurista, director de higiene, psicólogo, genetista o asistente social:
Desde una infancia vivida entre insalubridad y trágica promiscuidad, escuelas distantes para educarse, vagando en campos de labranza, potreros o tristes oficios callejeros, aquel infortunado niño llegará a una adolescencia marcada por la violencia intrafamiliar, deserción escolar, holgazanería, burdeles y cantinas. De allí, con un alma envilecida por la ignorancia, frustración y miseria, racismo y desesperación, el joven desempleado tendrá dos opciones, elegir ser carne de presidio o “policía”. Y si con suerte alcanzó a ir algo más allá de su bachillerato, “oficial de policía”.

Resulta durísimo, ¡terrible!, aceptar que en este país casi todos los policías que eligen ese oficio lo hacen -más que por temperamento o vocación- por escapar de la pobreza, el hambre y la delincuencia. Con esos antecedentes, una gran mayoría de oficiales y tropa policial han ingresado al cuartel a sabiendas que de entrada le espera un rapaz entrenamiento cargado de duros castigos y humillaciones. Superado este amargo periodo, pasará a una carrera de servicio público que lo abrirá a diversos ámbitos siempre cargados de desconfianza generalizada e indescriptible corrupción, los que -si logra manejarlos sagazmente, en el aséptico sentido de la palabra- contribuirán a que pueda “redondear el sueldo” para asegurar su futuro y el de su familia. La resentida tropa manejará sus “arreglos” en oscuros callejones, calles y zaguanes; la privilegiada oficialidad lo hará en radiantes hoteles, clubes sociales y despachos privados. Pero ahí no terminará la rapiña; en una suerte de canibalismo castrense, la intocable cúpula policial no dejará de someter y humillar continuamente a sus subalternos, a más de irrespetar a su antojo los reglamentos internos y derechos a los que por ley éstos últimos son acreedores.

El inframundo tiene sus propios métodos para mantenerse activo. Teje redes clandestinas de permanente extorsión, chivatería y conjura, información que se galvaniza, se intercambia y contacta cotidianamente con el ámbito policial. Así, ambos círculos se adaptan y se adoptan. Necesaria e indistintamente; con su innata capacidad para herir, matar, secuestrar o desaparecer. Ello, sumado a la agresividad, degradación de espíritu y personalidad del subgrupo delincuencial que integra y/o que rodea al policía, hará que su “espíritu de cuerpo” se sustente en la forzosa aceptación de hacer la vista gorda ante los latrocinios de sus camaradas y superiores.

Los malandrines inventan palabras para describir emociones que no experimentan, crean imágenes que no imaginan, procesan ideas que no comprenden; y ser policía en el Ecuador, ¡nada envidiable tarea!, significará aprender a compartir ambos umbrales. El agente tendrá que luchar de sol a sol por saber dónde está el agravio y no agraviar, especializándose en dominar términos, tácticas y vericuetos del bajo mundo para cumplir a cabalidad con su misión. Mezclarse en cuerpo y alma con los verdaderos profesionales del delito convierte a algunos policías -en detrimento de la verdadera ley y el orden- en tecnólogos del crimen, la infamia y la coartada. En jerarcas de la impunidad.

El ladrón teme al policía, pero lo burla. El policía teme al escrutinio de la sociedad civil, pero lo burla. De ahí que, dada la simbiosis, el mal policía está permanentemente en guardia y acechanza contra todo aquel que considere distinto a su identidad formal. Y no es capaz de disimular su resentimiento social, grosería, brutalidad, cínica desvergüenza, inclinación a la obscenidad y alcoholismo.
Durante esas nefastas horas de fin de septiembre -mientras el pueblo era reprimido a sangre y fuego y los francotiradores policiales se tomaban las terrazas y puntos estratégicos del Hospital donde retenían al Presidente, los comercios eran saqueados y los “choros” ejercían su ley a voluntad en las calles- vino a mi memoria una reflexión de Gregorio Marañón: “La policía es uno de los pisos fundamentales del Estado. La eficacia global de un país se puede medir por la eficacia de su policía. Se puede vivir sin ejército, sin organismos sociales o legislativos, mas no sin policía”.

Aquel jueves, cuando el Ecuador se quedó sin policía, llegamos a un punto crucial: el pueblo terminó de cavar la inmensa zanja que lo separaba de una ya desprestigiada policía y, adicionalmente, la policía y el ejército convirtieron a su antiguo rencor en un deseo de venganza que –si el Estado no toma las riendas con firmeza- tarde o temprano reventará. Y esas riendas deberán contar con las bridas y correajes de mejor templanza, pues de ellas dependerá la vida e integridad personal del presidente Correa y, de suyo, de nuestra amada patria y la Revolución Ciudadana. Se ha hecho necesaria la completa reconstrucción del pensamiento en todos los espacios donde se cultivan militares y policías ecuatorianos para el ejercicio de su labor. No permitamos que esos buenos agentes de la ley, excelentes personas algunos, ¡y que sí los hay!, caigan en la maraña corrupta y sediciosa por la que discurren sus ominosos compañeros.
La sumisión por humillación y continuo maltrato, junto a la pereza neuronal y rapiña institucional, desembocan en escatimar el más básico acopio imaginativo. De allí que esos deleznables policías fueran tan fácilmente desorientados y pervertidos por la cizaña politiquera.

Aquel jueves 30 de septiembre de 2010, en desigual combate, los policías se lanzaron primero contra el Presidente de la República y enseguida contra los hombres y mujeres, jóvenes y ancianos indefensos que se volcaron a las calles para evitar un hecho que hubiese hundido al Ecuador en el más desastroso caos y distanciado del proceso de unidad latinoamericana que muchos ansiamos consolidar. Y lo más repulsivo aún, algo que jamás podrá olvidarse ni perdonar: cobardemente parapetados tras improvisadas capuchas y pasamontañas, exhibieron al mundo entero como hacían suya toda la inventiva utilizada por los hampones que supuestamente es su deber anular, basureando de esa forma a sus propios principios de “Valor, Disciplina y Lealtad” y volverse contra su propio pueblo, el mismo pueblo al que una vez juraron “Servir y Proteger”.

Nuestro bello país Vs la actitud política

Por: Adriana Meza

Las personas tienen derecho a protestar cuando algo no está bien o hay algo que les perjudica. No obstante toda acción de arremeter contra la integridad de cualquier ciudadano resulta inhumano a los principios de los derechos a la vida, por muy condenable que sea su actitud.

 
Lo que si es real, que definitivamente fue una actitud irresponsable que el Presidente de la República
haya ido al Regimiento Quito, en un ambiente caldeado, donde calquier cosa podría ocurrir. Hay otros mecanismos diplomáticos(que no deberían de perder quienes están en la función pública) para llegar a acuerdos, y más aúnen un régimen donde se habla tanto de consensos.

Cuando las cosas en un país no están bien es una responsabilidad compartida, es decir de todos. Los ciudadanos por no saber elegir, los mandantes por no saber mandar, y quienes en este caso aparecen como "afectados" por no saber persistir oportunamente ante lo que demandan. Lo cierto es que la pugna por el poder es una guerra sin fin.
 
Vivimos en un país maravilloso, con mucha diversidad, variedad de climas, en medio de volcanes, mares, ríos, valles, estamos en el centro del mundo y somos bendecidos por la naturaleza, sin ser afectados mayormente por desastres naturales como ocurre en cualquier otra parte del mundo. Pero como van las cosas, si no fluye el razonamiento político sincero, el mayor desastre que va a acabar con nuestro país es el político. Si no fijense en estos datos históricos de la guerra sin fin:

De acuerdo a los datos históricos, los intentos "golpistas" de oficiales y tropas aisladas más recordados han sido: uno, en 1975 contra del Presidente Rodríguez Lara y otro, en 1986, contra Febres Cordero. El del 21 de enero del 2000, Lucio Gutiérrez, es acusado de haber participado en un golpe de Estado, que derrocó al Presidente Jamil Mahuad, creándose un Triunvirato que no fue aceptado internacionalmente por ser considerado ilegítimo. El orden constitucional fue establecido por las Fuerzas Armadas y el Vicepresidente Gustavo Noboa Bejarano fue  instituido como presidente.

El 20 de abril del 2005, la llamada “Rebelión de los Forajidos” en Quito, protestó contra el gobierno del Presidente Lucio Gutiérrez que desató una brutal represión. La situación fue insostenible hasta que el Congreso de Ecuador declaró la vacancia presidencial por abandono del cargo y procedió a nombrar a Alfredo Palacio como nuevo Presidente.

El Presidente Rafael Correa, enfrentó recientemente una revuelta de policías y acusó al líder opositor(Lucio Gutiérrez) de instigar un golpe de Estado. Esta situación que ha enfrentado el actual gobierno debería ser un llamado a la reflexión y ha redireccionar las cosas; y en vez de confrontar dedicarse a Gobernar.

Otro aspecto que tambien deberían de considerar los señores Asambleístas, es la opinión ciudadana respecto a vuestros desempeños, datos reflejados en una encuesta flash realizada el jueves 30 de septiembre por CEDATOS, el pasado 30 de septiembre, cuyos datos puntualizan que: " el 56% dice que la Asamblea Nacional tiene mucha responsabilidad en los últimos acontecimientos. La aceptación a la Asamblea bajó del 24% al 23% y la credibilidad en los asambleístas del 15% al 13%.

Galápagos nunca estuvo en riesgo

Por: Alfredo Ortiz Cobos, Asambleísta por Galápagos

Desde hace más de 50 años se viene difundiendo  la “industria del miedo” al afirmar que Galápagos está en peligro, los interesados lo hicieron con el propósito de conseguir más fondos y alcanzar más poder del Estado para el manejo de las Islas.

Ecologistas infantiles y grandes empresas de turismo continúan respaldando un modelo de explotación turística oligopólico, marginando a la sociedad y difundiendo campañas de desprestigio del Galapagueño.

Después de tantos años de “alaraca” se mantienen las mismas condiciones que existieron antes de la funesta declaratoria de patrimonio en riesgo. Se presentó como gran logro la matanza de cabras de Isabela, pero nunca se dijo que su costo fue  de 18 millones de dólares y que el costo por animal que se pudrió en el sitio de matanza fue más de 300 dólares por cada uno, sin aceptar la oferta de pescadores y cazadores que por 30 dólares los podían capturar vivos y aprovechar su alimento que bien pudo beneficiar a  miles de niños Ecuatorianos que necesitan alimentación proteínica.

Se sigue haciendo creer al Ecuador y al Mundo que el único atractivo ecológico esta en sesenta sitios de visita que son aptos para el modelo barco hotel, se oculta la existencia de cientos de lugares maravillosos que permitirían recibir muchos más turistas a través de un modelo distinto con alojamiento y recorrido terrestre que generaría gran riqueza al País y que mejoraría la economía de los Isleños.

Costa Rica, el Perú, con menos valores y atractivos naturales que Galápagos genera más de dos mil millones de divisas por turismo, mientras que el Ecuador no alcanza los quinientos millones de dólares.

Se sigue haciendo creer al País y al Mundo que Galápagos no soporta más turistas, que su desarrollo constituye un peligro y que para salvarlo es necesaria la ayuda extranjera.

Se ha usado a la UNESCO para que opine lo que le interesa a las ONG, para que nuestro Gobierno siga manteniendo la misma política errada de manejo de las Islas, o mejor dicho del manejo que le interesa a las fundaciones y  a los “ecologistas infantiles.

La UNESCO en su momento también le advirtió al Gobierno que la especie más importante, el ser humano estaba en peligro, que los problemas sociales no han sido resueltos y que la comunidad que allí vive no encuentra hasta hoy el verdadero desarrollo sustentable. Hoy nadie habla de la limitación de derechos constitucionales que tenemos los habitantes, sigo en la lucha por las compensaciones establecidas en la Constitución.

Falta un verdadero  modelo de desarrollo sustentable que proteja al hombre y a la naturaleza, nada se dice que Galápagos tiene desde hace 200 años las tierras improductivas que bien podría alimentar a su Población, que se debe dar paso actividades ambientalmente compactibles con el entorno para que sus habitantes mejoren sus condiciones de vida, la Unesco no  dice que durante 50 años las ONG han conseguido millones de dólares de los cooperantes internacionales sin que se haya destinado esos fondos a la producción de alimentos, al mejoramiento de los sistemas de salud, a una adecuada educación, agua potable, saneamiento ambiental, condiciones para el crecimiento económico para sus habitantes.

 

Patrimonio de "deshumanidad¨

Por: Adriana Meza

Es indiscutible que antes que el hombre en Galápagos, por siempre prevalecieron las especies endémicas. Pero no se debe echar de menos la importancia de la población humana, asentada en los diversos sitios poblados. 

Y es que resulta inhumano y aberrante, que siendo Galápagos Patrimonio de la Humanidad y uno de los centros turísticos de mayor importancia del país y el mundo, persistan los problemas de infraestructura como agua potable y alcantarillado. Y probablemente los “intelectuales”, dirán para eso están los municipios, los políticos, las instituciones, etc.

Pero que sentido tiene el derrochar dinero aisladamente en nombre de Galápagos y no centrar los recursos para ser invertidos según las prioridades. Es verdad que las instituciones locales tienen la responsabilidad social sobre una comunidad. Pero de que sirven las intenciones cuando se cuenta con un reducido presupuesto. Entonces donde queda también la responsabilidad de un Gobierno para a través de sus ministerios o subsecretarías concentrar sus esfuerzos para asistir a una población ávida de mejorar sus condiciones de vida.

En un patrimonio donde uno de los aspectos más lacerantes es la carencia de un adecuado sistema de salud, donde queda el privilegio que también deben de tener las personas cuando se vulneran sus derechos de acceder a una salud oportuna y profesional?.

Uno de los casos más conmovedores sin duda fue el hecho ocurrido hace aproximadamente seis años cuando una madre de la localidad(isla Isabela) en medio de su parto perdió a su bebé y le vino una hemorragia por la cual tuvo que ser trasladada de emergencia hasta Santa Cruz vía marítima y en media travesía ella también perdió su vida.

Y no está de más citar los casos de emboliados en las otroras épocas de captura de pesquería de pepino de mar, que obligatoriamente tenían que ser trasladados hasta la isla Santa Cruz, para su tratamiento. Porqué no recordar a José Luís Menéndez, quien perdió su vida tras haber sido trasladado vía marítima a Santa Cruz para ser asistido en la Cámara Hiperbárica.

Otro de los casos puntuales fue el hecho ocurrido hace aproximadamente tres años, donde una humilde mujer desde la isla Isabela tuvo que ser trasladada de emergencia mediante el vuelo logístico hasta la parte continental y falleció en el trayecto y la prensa nacionaldio cuenta de ello.

Son múltiples los casos donde la falta de atención médica oportuna y especializada pone en juego la vida de las personas. El incipiente sistema de salud en Isabela es un aspecto que deja mucho que desear, donde la salud de las personas parece ser instrumento de experimentos de pasantes  médicos rurales de la parte continental, atraídos posiblemente más por el sueldo que les representa, que por la devoción de servir.

Resultaría entonces oportuno que más que una majestuosa infraestructura médica, el sistema de salud esté dotado de especialistas médicos de planta y de transportación hospitalaria adecuada para casos de emergencia, hasta cuando esperamos famoso avión ambulancia que se prometió a la población en época de campaña electoral?.

 

El encuentro de los amantes

Por Adriana Meza

Con picardía el Patroncito Murillo, salía a relucir entre sus conversaciones de las “viejas de los velones” que asomaban a la media noche en la playa y que mantenían en zozobra a la población. Como mero macho manabita se le ocurrió llevar su machete y ver de que se trataba, pero sorpresivamente descubrió que no se trataba de almas del más allá, ni de fantasmas, de la pelona, ni mucho menos.

Era el viejo truco de amantes para despistar y reencontrarse a la luz de la medianoche y dar riendas sueltas a su pasión. En fin era más ético callar aunque como en todos los casos era el común denominador que el agraviado era el último en enterarse. Con tal que va más igual estábamos a cuantas millas de “Puerto Cacho”, y esa parecía ser una denominación que se llevaba con orgullo.

Y quien iba a entender aquello, si hasta el día de hoy resulta incomprensible el abismal “mundo de los cuernos”. Lo que si es real que esa era una gloria más común en los hombres, pero que al final ya parece estar de moda como algo normal en las mujeres. Con tal de que ahora parece ser más fácil y descomplicado jurar ante el altar cruzando los dedos el “hasta que la muerte nos separe” o “hasta que el otro nos separe”.

El estímulo y la excitación social parecen estar sesgada hacia una conducta social donde el sublime amor es confundido con el derroche de un momento pasional donde se ponen en juego muchos aspectos que contribuyen al deterioro de una sociedad. Todos en algún momento en “corto” traen a colación los líos amorosos, los involucramientos y relaciones extramaritales asumiendo como algo común atribuido al consumo de mariscos. ¿Y que tienen que ver los mariscos?..Cuando se trata de ser infiel, aunque sea comiendo yuca, se es infiel.

O tal vez es el encanto de Isabela, que nos hace estremecer de pasión y eso justifica la infidelidad…¿y que tiene que ver la Concha Perla, el Mirador, las Tintoreras, La Playa del Amor?. O tal vez, si sean fuentes de excitación..!!!, si hasta un Ex presidente se inspiró con su asistente.

Si Dante viviera y hubiera visitado Isabela, sin dudas hubiera titulado alguna de sus obras como la “Isla de los amantes”. Y con salva excepciones, quien no haya caído en pecado que lance la primera piedra..!!!.

Al final del ocaso, lo más importante no es los errores cometidos, sino darle valor a lo verdaderamente esencial en la vida y no esperar a que sea tarde para valorar lo perdido.