Falta de motobomba limita operaciones de aeropuerto
ISABELA, GALÁPAGOS.- La falta de una motobomba, que demanda la Dirección de Aviación Civil, mantiene limitada la operatividad de la Terminal aérea de Isabela que fue construida por el Gobierno Municipal e inaugurada el pasado 7 de octubre.
El 20 de octubre, el Alcalde Pablo Gordillo Gil envía un oficio al General (r) William Birkett Tórtola, Director General de Aviación Civil, dándole a conocer la culminación de la terminal aérea que fue construida con fondos gestionados por la Municipalidad ante el Ministerio de Obras Públicas y con recursos propios, bajo un monto de 500 mil dólares.
En el documento, Gordillo expresa que muy poco servirán los esfuerzos, si la Dirección General de Aviación Civil no da el visto bueno para iniciar los trámites de calificación de Terminal aéreo, así como la dotación de los equipos de aeronavegación y seguridad para la operación de los aviones comerciales, ante lo cual exhortó al funcionario a cumplir con el propósito de disponer de un aeropuerto que permita desarrollar el concepto de turismo con base local.
Con miras de hacer cumplir este objetivo, Gordillo apeló al apoyo del Diputado de Galápagos, Ing. Alfredo Serrano, quien en respuesta a la solicitud hecha por el Alcalde ante la DAC con fecha 17 de noviembre, Birkett, señala que se requiere de una motobomba de aeropuerto que tenga unos 3 mil galones de capacidad para efecto de las operaciones normales de casi cualquier tipo de avión en la pista del Aeropuerto José de Villamil.
Es de mencionar que este equipo tiene un costo aproximado de 800 mil dólares y no consta en el presupuesto de la DGAC para el año 2007.
Expresa además que ha solicitado a la Fuerza Aérea, en base de una conversación sostenida en meses pasados, la posibilidad que de ellos puedan designar dos operadores para la torre de la Base Aérea de Baltra.
Estos aspectos han limitado la operatividad de la terminal aérea de Isabela; mientras se mantiene firme el interés de aerolínea como AEROGAL que suscribió un convenio interinstitucional con la Municipalidad para el ingreso de una nave Boing 737-200 con capacidad para 77 pasajeros siempre y cuando el Municipio de Isabela y la Dirección de Aviación Civil suministren las garantías necesarias.
La mencionada compañía aspira iniciar sus operaciones regulares con 2 vuelos semanales, garantizando el 50% de los espacios para el modelo turístico local. Otra de las compañías interesadas en operar en Isabela, es Saereo SA , que ha solicitado a la Municipalidad espacios físicos para sus operaciones.
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