Impuesto ambiental a las botellas plásticas apunta a reducir impacto ambiental

En uno de los aspectos de la Ley de Reforma Tributaria, el Gobierno Nacional, busca disminuir la contaminación ambiental y estimular el proceso de reciclaje, por lo que se establece un impuesto “redimible” ambiental de USD 0.02 por botella plástica no retornable utilizada para contener bebidas alcohólicas, no alcohólicas, gaseosas, no gaseosas y agua. Mientras están exentas de este impuesto: las botellas de plástico no retornable usadas para envasar productos lácteos y las botellas de plástico no retornables usadas para envasar medicamentos.

Uno de los municipios pioneros en el manejo de desechos sólidos en Galápagos es el Gobierno Autónomo Descentralizado de San Cristóbal que a través de la dirección de gestión ambiental reporta que de los desechos que más se generan  en la isla son los denominados basura “rechazo” (zapatos, ropa, plásticos, etc).  De estos desechos un promedio de 13 toneladas han sido plásticos que son reciclados y enviados a empresas de la parte continental a través de los barcos que están destinados a llevar lo que reciclable, informó la bióloga María Elena Flores, directora del Departamento de Gestión Ambiental.

“Hay diferentes tipos de plásticos, muchos plásticos van más allá de los cien años de durabilidad dentro de los suelos, generando una gran contaminación, considerando que los suelos se contaminan con estos plásticos afectando a su vez a especies que ayudan también a las plantas que están desarrollándose, además de nuestras especies en los mares”, mencionó Flores.

Es de mencionar que el impuesto ambiental a las botellas plásticas que plantea el Gobierno Nacional en la Ley de Reforma Tributaria está fundamentada en cambiar los hábitos de consumo hacia nuevos hábitos que sean más respetuosos con el ambiente y la salud, estimulando el proceso de reciclaje, creando una cultura que conciencie a la población acerca del daño causado por los desechos plásticos y los gases contaminantes.